lunes, 21 de enero de 2008

Retrasos

Retrasos. Lunes, 21 de Enero de 2008

El tiempo es el eje sobre el que se articula toda actuación. Un proyecto en el que continuamente no se cumplen los hitos se transforma lentamente en una promesa vacía. Y si al final llega a materializarse se corre el grave y común riesgo de perder toda la eficacia que se pretendía obtener.

León está continuamente observando cómo sus proyectos llegan con retraso. Ni el Gobierno ni la Junta de Castilla y León son capaces de ofrecer garantías de futuro a los leoneses. Mientras, nuestra querida pero cada vez más deprimida Diputación provincial apenas puede intentar asumir nuevas inversiones.

Empecemos por el retraso habitual de este blog, el Parque Tecnológico de León. El Edificio de Usos Múltiples, futura base de numerosas empresas grandes y pequeñas, sigue sin estar listo. En principio su ejecución debería haber concluido en 2006. Luego se retrasó hasta septiembre de 2007. En la prensa local se comentaba más tarde que se terminaría antes de final de año. Sin embargo estamos ya en 2008 y no hay signos de que el Edificio esté listo. Ello provoca que el conjunto del Parque vea demorada su actividad.

Hewlett Packard, que está apostando por poner en León su tercer centro de excelencia de desarrollo de software en España (después de tener saturados los centros de Madrid y Barcelona gracias a su gran expansión en consultoría tecnológica), se iba a instalar en dicho Edificio del Parque. Mientras su disconformidad sigue en aumento están trabajando en el edificio CRAI-TIC de la ULE. No prevén que antes de mayo puedan estar trabajando en sus propias oficinas del Edificio de Usos Múltiples. Es una pena que una inversión tan importante se vea salpicada por esta falta de compromiso de la Junta.

El segundo retraso que se va a destacar es, como no, el desequilibrio regional existente en Castilla y León. La Junta ya ha demostrado con creces que su interés está en desarrollar Valladolid, apoyándose en el triángulo industrial que conforma con Burgos (principalmente) y Palencia. Una ciudad que no es capital más que de su provincia ha visto cómo en apenas 20 años ha superado con creces el nivel de vida europeo. En el otro extremo de la balanza se halla la región leonesa, sobre todo la olvidada provincia de Zamora.

El Gobierno de Zapatero prometía con su famoso Plan Oeste cambiar la situación. Pues bien, a punto de terminar su legislatura el Gobierno puede estar orgulloso de tener muchos proyectos en mente pero de no saber llevarlos a cabo en el eje temporal. Si está claro que desde Asturias a Badajoz todas las provincias pierden población y cada vez se encuentran más deprimidas, ¿cómo se puede paralizar un proyecto tan vital como la reapertura de la línea férrea de la Plata? ¿o cómo es posible no apresurar los plazos para concluir la autovía de la Plata? Esto sólo por enumerar un par de ejemplos.

Últimamente muchos ayuntamientos están solicitando una autovía hacia Portugal por La Bañeza. Teniendo en cuenta que se desconoce el retraso final de la León - Valladolid, ¿cuántos decenios podrían pasar hasta ver culminada esa conexión clave con el norte portugués?

¿En qué plazos se verán todas las actuaciones comprometidas con la Ciudad de la Energía de Ponferrada?

¿Para cuándo se va a poder acceder desde cualquier pueblín español a Internet con una conexión de banda ancha? Los políticos de Madrid y Valladolid no se dan cuenta de que hay más entidades además de los municipios, ¿con tantos asesores cómo es posible que desconozcan de forma tan notoria el espacio administrativo que gobiernan?

Incluso respecto al aeropuerto de La Virgen del Camino los leoneses podrían impacientarse por las promesas pasadas de disponer en enero de 2008 conexiones internacionales...

Con esta entrada sólo se pretende ofrecer una pequeña muestra del repertorio de promesas demoradas al que estamos acostumbrados en León. De todas formas no se trata sólo de criticar a las administraciones. Al fin y al cabo éstas decisiones las toman políticos elegidos por nosotros. ¿Hacemos cada uno en nuestro ámbito lo necesario para unirnos al carro del progreso? ¿O por el contrario simplemente nos escondemos en el típico pesimismo leonés para no aportar nada?

Está claro que las cosas no salen solas, y menos con estos gobiernos que tenemos que soportar. Sin embargo también es evidente que el éxito de nuestros proyectos personales se logra con planificación, esfuerzo y dedicación. Luchemos por nuestros intereses para así contribuir al desarrollo común!

1 comentario:

Anónimo dijo...

david, buen trabajo.
enhorabuena por tu blog.